El Desnudo Reclinado de Emélie

Félix-Jacques Moulin (1852) .

Bajo esos aires, Venus la concede,
evitando el disfraz que arguye el velo,
porque así la deidad se impone adrede.

¡Es rotundo el moblaje! Atado el pelo
estricto, bien publica la quietud;
con nobleza se tañe el violonchelo.

Es el dorso comarca en plenitud
—hallazgo de la piel en la captura—;
y al bendecir la cándida virtud:
los orbes francos, tienden la hendedura.