los-gocho

 

Rechinó la baldosa de París
desde el Andes, apéndice de guerra.
¡Espumaron el vino con anís!

La bóveda triunfal, alzada en tierra,
fue el descaro, el espíritu malquisto,
en hombros del burgués que teme y berra.

El grillete a las botas fue previsto.
Banqueros apiñados al trasnocho
de las calles, al no ayudar al cristo;
de sus bocas enanas creció el gocho.

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